ENFRENTADO UNA CRISIS DESDE LA RAZÓN

La estrategia de sustentabilidad de los lecheros más poderosos del mundo.

M. A. G. von Keyserlingk et al., 2013 Universidad de Columbia Británica, Vancouver

Durante el último siglo, la industria láctea estadounidense ha realizado enormes mejoras en la eficiencia de la producción (Martin y Mitra, 2001), lograda en parte invirtiendo en tecnología y activos productivos y pagada por economías de escala. La intensificación de la industria es tal, que las granjas con más de 500 vacas lecheras representan ahora el 63% de la oferta de leche en los Estados Unidos (USDA-NASS, 2012a), frente al 39% hace una década (USDA-NASS, 2002) . Cuando se combina con las preocupaciones sobre el crecimiento de la población mundial, las presiones potenciales y los desafíos asociados con la seguridad alimentaria, el crecimiento económico, las preocupaciones sociales y los asuntos ambientales (Godfray et al., 2010a, b, Parker 2011; (Steinfeld et al., 2006), existe una necesidad urgente de una evaluación crítica de la sostenibilidad de la industria láctea estadounidense.

Desde 1940, el número de vacas ha disminuido y el tamaño promedio de los hatos ha aumentado. Esta intensificación, combinada con el cambio hacia un consumidor en gran parte urbano, ha dado lugar a un mayor escrutinio de la industria láctea por movimientos sociales y ambientales y a una creciente preocupación por la sostenibilidad de la industria láctea. En respuesta a estas preocupaciones, un grupo de científicos especializados en bienestar animal, manejo de nutrientes, emisiones de gases de efecto invernadero, ciencias animales, agronomía, ingeniería agrícola, microbiología y economía emprendió una revisión crítica de la industria láctea estadounidense. Aunque se identificó que el sistema lechero estadounidense tenía puntos fuertes significativos, el consenso era que la estructura actual de la industria carecía de la capacidad de adaptación para asimilar tanto los cambios sociales del consumidor como los cambios ambientales. Identificamos varios factores que afectan la sostenibilidad de la industria lechera de los Estados Unidos, incluyendo el cambio climático, la rápida innovación científica y tecnológica, la globalización, la integración de los valores de la sociedad y las iniciativas de investigación multidisciplinarias. Los desafíos específicos incluyen la migración hacia el oeste de la producción de leche en los Estados Unidos (que está en desacuerdo con las proyecciones de reducción en la precipitación y las limitaciones asociadas en la disponibilidad de agua para el ganado y los cultivos), y la división creciente, como pérdida de confianza entre las prácticas industriales y las percepciones del consumidor. Abordar estas cuestiones requerirá una mayor alineación entre las prácticas de la industria y los valores de la sociedad, basándose en el liderazgo de la industria y el compromiso sostenido con otros participantes interesados, incluidos los investigadores, los consumidores y el público en general.
Objetivo
• Revisión crítica de la industria láctea de USA.
• Entregar al lector interesado antecedentes para sacar sus propias conclusiones en el contexto chileno.
Tipo de estudio
La revisión actual fue realizada por un grupo de especialistas que representan diversos aspectos de la industria láctea, quienes se reunieron  dos días en junio de 2011, enero de 2012 y junio de 2012. El documento, surge como consecuencia de estas discusiones.
Mediciones
Se han dividido en 3 componentes: (1) una definición de trabajo de sostenibilidad y una amplia caracterización de la actual industria lechera de los Estados Unidos; (2) la identificación de cada uno de los pilares de la sostenibilidad, enfatizando el estado actual de la industria láctea, así como la identificación de debilidades, oportunidades y áreas que requieren más investigación; y (3) una discusión de las limitaciones de nuestra revisión y conclusiones generales.
Resultados principales
• Producción y consumo: La industria láctea actual de USA produce 59% más de leche con un 64% menos de vacas, consumiendo un 77% menos de comida y un 65% menos de agua por litro de leche producida en comparación con la producción lechera de 1944 (Capper et al., 2009). En la actualidad, alrededor del 88,5% de los sólidos lácteos producidos se consumen en los Estados Unidos (NMPF, 2012), y la mayoría (81%) por los consumidores que viven en áreas urbanas (> 50.000 habitantes / ciudad, US Census Bureau, 2010).
• Mano de obra: La industria láctea de USA depende en gran medida de los trabajadores nacidos en el extranjero (Martin, 2002). De unos 138.000 empleados a tiempo completo de granjas lecheras en todo el país, las estimaciones indican que 57.000 son nacidos en el extranjero (Rosson et al., 2009).
• Cambio del uso de la tierra: Aunque aproximadamente el 36% del suministro de maíz de USA está destinado a la alimentación doméstica y al uso residual, un creciente 40% de la oferta se utiliza hoy para la producción de etanol (CAST, 2012).La asignación de esta base de tierra decreciente utilizada para la producción de cultivos es un componente clave de cualquier discusión de sostenibilidad futura de la industria láctea de USA.
• Energía: Las lecherías modernas utilizan fuentes de energía eléctricas y de petróleo para vehículos, bombas, motores, unidades de ordeño y enfriamiento, iluminación y reducción de calor. Existe poca información revisada por expertos sobre el uso de energía por parte de la industria láctea. La investigación indica que aproximadamente el 50% de la energía utilizada en las granjas lecheras (excluyendo la producción de cultivos) se usa en el centro de ordeño (refrigeración de leche, calentador de agua eléctrico y bomba de vacío) y el resto en el área de la vivienda (Incluyendo iluminación, equipo de alimentación, ventilación y manejo del estiércol (Ludington et al., 2004).
• Economía de escala: Las fuerzas detrás del aumento del tamaño de la granja y las economías de escala han sido conocidas desde hace tiempo como la «cinta de correr tecnológica» de la agricultura (Cochrane, 1958).
• Producto leche: La leche es una mercancía con propiedades difíciles de distinguir entre un productor y otro. Esto, junto con muchos productores que compiten por la venta de leche, significa que en el mercado actual, existe poca posibilidad de que los agricultores influyan en el precio que reciben. Por lo tanto, la reducción del costo de producción y la mitigación de fugas de dinero (Mastitis, cojeras y otros) se considera la principal estrategia de gestión disponible para los productores para cualquier aumento de las ganancias.
• Precio: Desde 2007, el precio de la leche pagado al productor de leche de USA ha sido razonablemente competitivo comparado con otros países exportadores [principalmente Nueva Zelandia, Australia y la Unión Europea (UE)], lo que ha incentivado la producción de leche cruda por lo cual USA ha comenzado a exportar leche (alrededor del 13% de la leche producida: NMPF, 2012).
• Intensificación: La intensificación de la agricultura animal ha resultado en efectos perjudiciales para el medio ambiente, la disponibilidad de alimentos, las poblaciones rurales, la biodiversidad y el bienestar de los animales (Fraser, 2008; Croney y Anthony, 2011). Un argumento utilizado para defender la intensificación de la agricultura animal es que el aumento de la eficiencia permitirá mejorar la producción y, por lo tanto, un mayor potencial para alimentar a los 9 mil millones de personas en el mundo en 2050 (véase Capper et al., 2009; Et al., 2009, Godfray et al., 2010a).
• Huella hídrica: La producción animal representa globalmente un tercio de la huella hídrica – cantidad de agua dulce utilizada en la producción o suministro de los bienes y servicios de la actividad humana (Mekonnen y Hoekstra, 2012), y el 98% de la huella hídrica de la producción animal se ocupa para producir alimentos (Shiklomanov, 2000). Según Hoekstra (2012), las dietas de alimentación que contienen más forrajes reducirán la huella hídrica de la producción de leche, dado que la huella hídrica de los concentrados es 5 veces mayor que la de los forrajes.
• Sustitución en crisis: La producción basada en praderas brinda la oportunidad de contribuir a la producción animal sin competir con los sistemas alimentarios humanos a base de grano (Capper et al., 2009).
• Calentamiento global: Las temperaturas globales de la superficie ya han aumentado entre 0,2 y 0,6 ° C desde el año 2000, y se prevé que aumenten de otros 1,5 a 5,8 ° C para finales de siglo (IPCC, 2007). Para mantener los sistemas productivos de cultivos y forrajes frente a estos cambios climáticos, los agricultores necesitarán manejar sistemas flexibles y robustos para adaptarse rápidamente a las fluctuaciones ambientales.
• Carbono: La industria láctea ha recibido considerable atención negativa con respecto a su huella de carbono, en particular su dependencia de recursos no renovables. La dependencia de las fuentes de energía no renovables es, por definición, insostenible (Godfray et al., 2010a).
• Contaminación: El estiércol animal suele ser aplicada a la tierra para suministrar nutrientes para el crecimiento de los cultivos, pero la aplicación en exceso respecto de las necesidades de los cultivos resulta en pérdidas de nutrientes y contaminación de las aguas subterráneas, superficiales y aéreas (Knowlton et al., 2004). La agricultura intensiva ha sido identificada como una fuente significativa de contaminación de N y P de agua de superficie (contribución mediana = 6.8 a 48% de la pérdida de P y 5.2 a 23% de la pérdida de N, según Smith, Alexander, 2000). La sal y los nitratos son quizás los contaminantes más extendidos en las aguas subterráneas en USA; la contaminación por sal es un desafío creciente en muchas regiones de USA, con un efecto perjudicial bien establecido en el ganado (Grout et al., 2006). Un grupo de lecherías ubicadas en el Valle de Yakima Washington, que en 2009 poseían colectivamente 17.240 vacas lecheras maduras y otras 7.000 vaquillas y terneras, fue la principal fuente de contaminación farmacéutica (monensina y tetraciclina) en la mayoría de las muestras tomadas desde los predios lecheros, incluida el agua de bebida para humanos (US EPA, 2012a).
• Medio ambiente: La producción lechera tiene un impacto en el medio ambiente a través de las emisiones al aire (Alvarado et al., 2012). Los principales contaminantes gaseosos son el dióxido de carbono (CO2), el metano (CH4), el óxido nitroso (N2O) y los óxidos de nitrógeno (NO y NO2), el amoníaco (NH3), el sulfuro de hidrógeno (H2S) y compuestos orgánicos volátiles (COV). Además de las emisiones de gases, están las partículas, que incluyen el polvo grueso y las partículas finas, que también se liberan de las operaciones lecheras. Por ejemplo, los COV en el aire reaccionan con los óxidos de N y la luz solar para formar ozono, lo que afecta a la función pulmonar normal en muchos seres humanos sanos (Kirkhorn y Garry, 2000). La mayoría de los estudios de análisis del ciclo de vida muestran que la intensidad de emisión de la producción lechera es cercana a 1 kg de CO2 Eq / kg de leche producido en la explotación lechera o 2,4 kg de CO2 Eq / kg de grasa y proteína procesada por la industria.
• Aspectos económicos: Appleby et al. (2003) explicaron que el continuo impulso para proveer comida barata es un problema, en parte, porque los bajos costos reflejan una incapacidad para tener en cuenta apropiadamente valores como la biodiversidad, el bienestar de los animales y la calidad del aire y del agua. Para controlar un valor de leche cruda en el mercado final, los costos normalmente deberán ser regulados y respaldados por todos los productores de leche cruda. De lo contrario, algunos productores pueden convertirse en corredores libres, evitando el gasto de adoptar prácticas más socialmente aceptadas, mientras siguen beneficiándose de la prima de precio asociada con el bien social de interés. Prevenir que estos actores especuladores “jinetes libres” participen en la industria láctea será necesaria si la sostenibilidad de la industria láctea de USA es una prioridad. La verificación por medio de auditorías independientes, que sean transparentes y se apoyen a través de reglamentos basados en la ciencia, sin duda también jugarán un papel importante en permitir la entrada de nuevos actores al mercado de la leche cruda de USA.
• Globalización: La globalización del mercado de la leche está teniendo un papel importante en la configuración de la industria lechera de USA. La globalización del sistema alimentario se ha producido en gran parte como consecuencia de la refrigeración, el transporte más barato, el aumento de la comunicación y la reducción de las barreras comerciales y los aranceles sobre los productos agrícolas (Anderson, 2010; Godfray et al., 2010b). La globalización de los mercados de la leche da lugar a precios de leche casi iguales entre los países, con excepción de los países que utilizan cuotas (Dairy Australia, 2011). Aunque los costos totales de producción de los países exportadores tienden a ser similares (o no serían capaces de competir), la estructura de los costos varía. Por ejemplo, los sistemas basados en praderas en Australia y Nueva Zelanda tienen costos fijos relativamente altos asociados con el precio de compra de la tierra, que ha aumentado aproximadamente 7 veces en los últimos 20 años (New Zealand Dairy Statistics), pero los costos variables de producción son relativamente bajos debido a que se utilizan poco concentrado, vivienda y mano de obra suplementaria. Por el contrario, los productores de leche de USA esperan mayores niveles de productividad de la vaca, pero también tienen mayores costos variables debido a estos insumos adicionales (IFCN, 2011). La implicación de la diferencia en la estructura de costos entre estas dos regiones globales, es que USA puede responder mucho más rápidamente a los altos precios mundiales de la leche con un aumento de la producción, pero también son más sensibles al equilibrio global de oferta y demanda cuando la leche está en exceso.
• Indocumentados: La estructura operativa actual de la mayoría de los rebaños lecheros en USA es de carácter intensivo. Algunos argumentan que existe una gran necesidad de integrar la justicia social y los derechos laborales agrícolas en la industria agrícola para lograr un mayor grado de profesionalismo (Fraser, 2008; Wolf, 2008) y hacer de la industria láctea un lugar de trabajo más deseable. Un estudio de la Federación Nacional de Productores de Leche de USA el 2009 estimó que la eliminación de los trabajadores indocumentados (como se quiere implementar actualmente) reduciría en 1,34 millones las cabezas de ganado lechero, disminuiría la producción de leche en 11,8 billones de kg / año y haría desaparecer a 4.532 predios lecheros (Rosson et al. Al., 2009).Trabajos de Bewley et al. (2001) informaron que la falta de habilidades de gestión de recursos humanos son un factor importante que inhibió el crecimiento de las granjas lecheras de Wisconsin, lo que indica que la educación en términos de gestión de recursos humanos debe convertirse en una prioridad.
• Bienestar de los animales: Pocos actores en la industria láctea de hoy estarían en desacuerdo con el hecho de que las enfermedades, las lesiones, las bajas tasas de crecimiento y los problemas reproductivos son negativos para el animal y también para la viabilidad de la granja. Sugerimos que la rápida adopción de mejores prácticas científicamente establecidas, proporcionan un área clave de oportunidades para la industria láctea de USA.
• Compromiso público: Es importante señalar que la aceptabilidad del público en USA no se limita al pilar social de la sostenibilidad. Muchas de las preocupaciones acerca de los impactos económicos y ambientales de la producción de alimentos, están enraizadas en la aceptabilidad pública de USA (Blandford y Fulponi, 1999); una comprensión de los valores públicos es, por lo tanto, importante para todos los aspectos de la producción láctea sostenible.
• Investigación multidisciplinaria: Hasta la fecha, la mayoría de los sectores agropecuarios públicos y privados que abordan la investigación en agricultura en USA, se han centrado en la productividad y la eficiencia, especialmente en las tecnologías que complementan los sistemas de producción existentes y conducen a beneficios para el sector privado (NRC, 2010). Este enfoque por sí solo no abordará las brechas en el conocimiento y las necesidades educativas descritas anteriormente para muchos aspectos de la sostenibilidad de la producción lechera y la comprensión del consumidor. También necesitamos una investigación transformadora que permita el rediseño de todo el sistema (Reganold et al., 2011). El reto es que la investigación transformacional requerirá, sin duda, de una fuerte financiación pública, ya que este tipo de investigación es menos probable que produzca ganancias inmediatas de la compañía o de los accionistas (el principal impulsor de la investigación del sector privado).

Discusión
Hemos identificado y presentado varios factores importantes que afectan la sostenibilidad futura de la industria lechera de USA, incluyendo el cambio climático, la rápida innovación científica y tecnológica, la globalización, la falta de integración de los valores sociales y la falta de iniciativas de investigación multidisciplinarias. También argumentamos que la sostenibilidad es más que la rentabilidad económica; también se relaciona con preocupaciones ambientales y sociales, incluyendo la calidad de vida de los trabajadores y los animales en los rebaños lecheros. Es necesario considerar a la opinión pública sobre la aceptabilidad tanto de las antiguas como nuevas prácticas, incluidas las nuevas tecnologías. El compromiso sostenido entre los productores, los diversos sectores de la industria, los consumidores y las autoridades, será esencial para reconocer e implementar prácticas más sostenibles. Reconocemos que esto requerirá un cambio de paradigma importante por parte de la industria láctea de USA para desarrollar de manera colaborativa un camino para asegurar la sostenibilidad a largo plazo de la industria.

Es evidente que queda mucho trabajo por hacer, en la identificación de mecanismos que permitan a los productores de leche cruda de USA expresar sus inquietudes independientemente de otros sectores de la industria que puedan tener demandas o agendas comerciales aparentemente contrapuestas. Un ejemplo de esto, existe justo al norte de la frontera con los Estados Unidos y en Suecia. Los Productores de Leche de Canadá (DFC) y Suecia son organizaciones dirigidas por productores para productores.

La organización Canadiense por ejemplo, proporciona liderazgo en el aporte de fondos para la investigación y solución de sus propios desafíos; DFC compromete aproximadamente $ US 750,000 por año, a la investigación de la producción primaria de calidad (no necesariamente en cantidad) y por lo general se aprovecha esta inversión para que los  productores de leche busquen fondos de contrapartida. El resultado son documentos basados en la ciencia que describe las mejores prácticas acordadas por diversos grupos de interesados, incluyendo la industria láctea, el gobierno, los distribuidores de cadenas de alimentos y la Federación Canadiense de Sociedades Humanas.

Por el contrario, una parte significativa del la investigación llevada a cabo por las instituciones de investigación de USA es patrocinada por corporaciones y, como tal, típicamente se enfoca en medidas de interés económico inmediato que apuntan típicamente al aumento de la productividad y eficiencia de los animales o de las granjas. Dairy Management Inc. (Rosemont, Illinois) recauda dólares de las ventas de leche de los productores de USA, pero estos fondos se usan para investigación y marketing relacionados con la demanda y no para la investigación de prácticas de producción lechera. Esto deja una brecha importante en el financiamiento de la investigación que se ocupa de las crecientes preocupaciones públicas sobre la producción de ganado lechero, incluyendo la sostenibilidad, el impacto ambiental y el bienestar de los animales de abasto. Instamos enérgicamente a que más fuentes públicas de financiación (incluida la USDA) y la industria láctea en general, comiencen a financiar la investigación (incluida la que cae en el ámbito de las ciencias sociales) que se requerirá para apoyar mejores prácticas sostenibles en los años venideros.

El compromiso significa más que el anuncio de un posición arraigada; implicará conversaciones en las que los diversos sectores de la industria láctea escuchen con atención y dialoguen con los ciudadanos en la sociedad en general. Esto significa que la industria láctea debe estar preparada para hacer cambios para acomodar las expectativas del público. Este enfoque beneficiará a la sostenibilidad a largo plazo de la industria al ayudar a garantizar que los consumidores (y los ciudadanos) tengan confianza en los métodos de producción lechera y que las prácticas de los productores de leche se ajusten a los valores de nuestra sociedad más amplia. Para avanzar hacia la sostenibilidad se necesitará coraje para superar los roles esperados, con la comprensión de que trabajar juntos es el camino más práctico. Reconocemos que esto no será fácil, pero si los participantes vienen a la mesa con un espíritu de respeto, compromiso y tolerancia, entonces hay esperanza de que se puedan identificar soluciones prácticas.

Conclusiones
• Precio de la leche cruda: Si USA no mantiene un precio de leche cruda incentivador las posibilidades de exportar se minimizan, subordinándonos a la importación de leche en polvo de terceros.
• El medio ambiente: A menudo se plantean preocupaciones ambientales cuando se discute la sostenibilidad, y éstas han recibido probablemente la mayor atención en la prensa académica y popular. Existe un interesante debate de que los productores de alimentos para animales experimentan una competencia cada vez mayor por el agua, la tierra y la energía, y que existe la necesidad de mitigar los efectos negativos de la producción de alimentos sobre el medio ambiente.
• Clima global: Estas tendencias predichas en temperatura y precipitación indican desafíos para las operaciones lácteas con una base de suelo limitada y una fuerte dependencia de forraje importado y nutrientes de grano, ya común en las llanuras altas del sur y el oeste de USA.
• Energía: Lo que parece claro es que con el aumento del consumo global de energía (IPCC, 2007), la mejora de la eficiencia del uso de la energía dentro de la industria lechera puede ser cada vez más importante (Schade y Pimentel, 2010), especialmente el uso de energía proveniente de recursos no renovables.
• Nutrientes del suelo: El aumento de la preocupación pública por la calidad del agua y la mayor concientización sobre el impacto potencial de la producción intensiva de ganado ha llevado al desarrollo e implementación de regulaciones ambientales cada vez más estrictas (Knowlton et al., 2004). Una posible solución puede ser la redistribución de las explotaciones lecheras a través de las regiones; en otras palabras, una mayor proximidad del ganado a los cultivos forrajeros para facilitar una mejor distribución de estiércol / nutrientes y opciones de reciclado.
• Emisiones al aire: Dada la gran variación en las emisiones de gases de efecto invernadero observada en las granjas por kilogramo de leche producida, es probable que las estrategias de mitigación tengan que adaptarse, en parte, a la situación real en cada granja (Vellinga et al., 2011).
• Globalización: La capacidad de la industria láctea de USA para responder rápidamente a los aumentos del precio mundial crea oportunidades para la exportación, pero puede obstaculizar la sostenibilidad si se promueve el aumento de la producción lechera a nivel de explotación lechera, aislando todos los factores que afectan la sostenibilidad a largo plazo. Hasta la fecha, se ha prestado poca atención a las consecuencias de las oscilaciones de los precios mundiales en términos de los pilares sociales y ambientales de la sostenibilidad. Se necesitará un esfuerzo concertado inter y multidisciplinario para comprender el impacto de una fluctuación del precio mundial de la leche en la sostenibilidad de la industria lechera de USA. Por último, se necesitará financiamiento para este tipo de investigación, pero hasta la fecha, hasta donde sabemos, no hay programas de financiamiento dirigidos a este tipo de estudios en USA.
• Recursos humanos: La falta de habilidades de gestión de recursos humanos, combinada con la falta de identificación de soluciones con respecto a la situación de los trabajadores indocumentados en USA, ha dejado a la industria vulnerable. Incentivar este profesionalismo también puede hacer que la industria lechera sea un lugar más deseable para trabajar.
• Bienestar: Se necesita más trabajo para ayudar a los productores a implementar cambios que mejoran el bienestar animal, pero se sabe poco sobre la mejor manera de alentar y facilitar eficazmente estos cambios en el productor.
• Compromiso público: Alentamos un compromiso similar, al de los productores de huevos de USA que se alinearon a los requerimientos del público consumidor, entre la industria láctea y otras partes interesadas para comenzar un enfoque más colaborativo y así abordar las preocupaciones compartidas de bienestar y fomentar la sostenibilidad a largo plazo.
• El camino hacia la sostenibilidad: Gran parte del financiamiento público actualmente dedicado a la investigación agrícola en USA se centra en la producción y la eficiencia (Reganold et al., 2011); se necesita desesperadamente recursos cambiantes para financiar nuevas investigaciones transdisciplinarias. Esta investigación debe abordar los complejos factores socioecológicos que afectan a la sostenibilidad de la industria lechera de USA.

Esperamos que nuestra revisión fomente la planificación estratégica de todo el sistema, la investigación asociada necesaria y las acciones necesarias para crear un sistema lácteo sostenible que sea ambientalmente sólido, socialmente aceptable y económicamente viable. Nuestra revisión se basa en la opinión de que la investigación continúa en esta área es esencial.

Comentario

Para sobrevivir a la siguiente generación como productor de leche bovina se requerirá un cambio de paradigma importante. Este consiste en desarrollar de manera colaborativa un camino llamado “Lechería de precisión” para asegurar la sostenibilidad a largo plazo de la producción de leche.

Este concepto ha posibilitado que países exitosos en trabajar en conjunto, puedan hoy expandir sus operaciones primero de procesamiento y segundo de producción de leche cruda, asegurando en el nuevo territorio el suministro de leche.

Esta idea para Chile viene de a fuera y es el fruto de la investigación de pensamiento crítico. Sigamos los ejemplos de países exitosos. La humildad es la cortesía del inteligente.